Por Daniela Suau Contreras
Periodista, activista movilidad sustentable y feminista.
Fotografías: Fabián Heredia
Desde que comenzó la crisis sanitaria que ha afectado la movilidad de las personas a nivel mundial, una de las grandes iniciativas que surgieron en distintos países fue cómo ayudar al personal de salud para que pudiese desplazarse de manera segura a sus lugares de trabajo, entendiendo la relevancia de la labor que desempeñan.
Ese fue el compromiso de Bicitekas y de la Alcaldía de la Bicicleta de Ciudad de México (CDMX), quienes en abril pasado decidieron dar vida al proyecto “Recicletas”, con el propósito de conseguir bicicletas que pudiesen donarse al personal de salud dispuesto a usarla. A la fecha han entregado más de 100 bicicletas.
“La bicicleta está entre las opciones de movilidad de menor riesgo de contagio y tiene la ventaja de no ocupar espacio, no producir contaminación, ni ruido, ser un vehículo de bajo costo y por tanto accesible a la mayoría de la población y resolver las necesidades de movilidad con sana distancia para un número creciente de trabajadores, tanto de la salud como de todos los sectores de la economía. La bicicleta está en camino de ser la reina de las soluciones de movilidad ante covid-19, porque lo tiene todo: sana distancia, eficiencia, bajo costo, rapidez para implementar y resultados inmediatos”, afirma Areli Carreón, Alcaldesa de la Bicicleta de CDMX.
Comenzaron solicitando a la comunidad ciclista y a la población en general, la donación de bicicletas en desuso, piezas sueltas, refacciones en buen estado, dinero en efectivo y trabajo voluntario para lograr reciclar y armar bicicletas, bautizadas como Recicletas. Al mismo tiempo, convocaron al personal sanitario de cualquier hospital público o privado de la ciudad, que tuviera disposición a usar la bicicleta como modo de transporte urbano, a registrar su solicitud en www.bicitekas.org
Para Agustín Martínez, presidente del consejo directivo de Bicitekas: “Este proyecto ha demostrado la capacidad organizativa de la comunidad ciclista de Ciudad de México, así como la solidaridad y apoyo de los capitalinos hacia los trabajadores de la salud, en medio de condiciones de trabajo inéditas. Una vez más la bicicleta demuestra ser un vehículo resiliente, capaz de servir en situaciones de emergencia y que provee soluciones de movilidad a prueba de fallos”.
A la fecha, recibieron casi 300 solicitudes y se han logrado armar y entregar 100 recicletas a trabajadores de la salud que laboran en todas las especialidades en los hospitales de la CDMX. Han recibido US$1400 en donativos, con apoyo del Instituto para la Política de Transporte y Desarrollo (ITDP) y donativos de la sociedad civil, así como el apoyo en especies y la donación de más de 2.500 horas de trabajo voluntario de mecánicos expertos, coordinados por Luis Franco, administrador, y Agustín Martínez de Bicitekas.
Pensando en el personal médico que se moviliza en transporte público y que vive fuera de la Ciudad de México –lo que a diario deben hacer al menos 8 millones de personas-, según el presidente de Bicitekas, ha significado un importante ahorro, ya que pueden llegar a gastar hasta $70 pesos mexicanos en promedio al día, lo que se traduce en US$3,14 ($2.400 pesos chilenos (CLP)). Este monto asciende semanalmente a $350 y mensualmente a $1.400 pesos mexicanos, es decir, al menos US$63 ($48.000 CLP).
La distribución de bicicletas donadas, entre mujeres y hombres, dentro del personal de salud, llega a un interesante porcentaje en el que las ciclistas se han visto favorecidas en 70% y los ciclistas en 30%.
Por parte de Bicitekas y de la Alcaldía de la Bicicleta de CDMX han recabado algunos testimonios de quienes se han visto beneficiados con las Recicletas, entre los que destacan el de Selma Abigail, residente de nefrología, quien señala que: “Ahora que estamos en fase 3 de la contingencia por la pandemia de covid-19, debemos trabajar a marchas forzadas y es más seguro viajar en bicicleta varias veces al día y en horarios variables que tomar el transporte público, porque como personal de salud sufrimos agresiones y no sólo físicas, sino insultos, rechazo y discriminación. Muchas gracias por su labor altruista”.
Lo mismo relata un médico general, quien les escribió diciendo: “Deseo adquirir una bicicleta para poder movilizarme sin riesgos a mi área de labores. Vengo del estado de Chiapas y estoy aquí para apoyar a nuestros hermanos de la CDMX, estaré muy agradecido siempre ya que estos momentos es cuando mas se necesita del apoyo de todos ustedes. Gracias”, afirma el especialista.
Sobre la posibilidad de ampliar este programa a otros rubros laborales, Agustín Martínez nos cuenta que lo están evaluando, ya que “hay otras poblaciones con necesidad de movilidad en bici, como trabajadoras y trabajadores domésticos, meseros, chefs”. Además, nos relata que muchas y muchos de los beneficiarios no sabían andar en bicicleta, así que les han dado clases de ciclismo y les han señalado que si necesitan algo pueden contactarles.