Val Vieira: en bicicleta de alguna manera sí me siento más segura

La creadora de contenido tiene como su principal forma de movilizarse a este noble medio de transporte.

Por Michelle Raposo

Fotos: Víctor Rojas

Creativa, divertida y acostumbrada a que escriban mal su apellido, Valentina Vieira (@lavale.vieira) tiene recuerdos vagos de sus primeros años arriba de la bici que se mezclan entre Santiago y un “pueblo cerca de la cordillera que se llama Saladillo”. De la primera bici eso sí, tiene memoria de que era morada y con rueditas. 

“Pero me acuerdo que una navidad, cuando tenía como seis años, me regalaron una sin rueditas, y dije como pucha no la sé ocupar y mi papá me dijo cómo no, si vas a aprender”.

Fue en un estacionamiento donde se dio la magia. “Él me iba sujetando atrás, echándome vuelo, y en un momento le digo, dale más rápido, más rápido, y miro para atrás y mi papá ya no estaba”.

“De hecho yo creo que después de eso me caí, o tal vez lo inventé como recuerdo dramático. Podemos decir que después me caí. Yo sé que me caí una vez, incluso con mi papá él ayudándome atrás y nos caímos los dos”.

Otro aliciente para lanzarse a andar sin apoyo, recuerda Vale, “es que en esa época, en el tiempo en que estaba aprendiendo a pedalear justo fue el boom de 31 minutos, con la canción también de la bicicleta, estaba justo en ese rango etario”. Gracias por tanto Freddy Turbina.

¿Y ahora te sigues moviendo en bicicleta?

Ando harto en bici, de hecho primero que todo ando como medio de transporte. Siempre lo vi más práctico en ese sentido, y no tanto como deportivo.

Aparte de la utilidad diaria, ese elemento deportivo también ha comenzado a aflorar. “Siempre había hecho deporte, y también siempre había ocupado la bici como medio de transporte. Pero como eran distancias cortas, lo vi como una actividad que también podía ser deportiva, entonces ahora igual estoy andando en bici como distancias más largas como para tratar de hacer algo de ejercicio”.

Con tu uso diario de la bici ¿Cómo sientes que la bicicleta ayuda en la independencia de las mujeres?

“Si voy, no sé a carretear, por ejemplo, igual salgo en bici. Voy a un bar, por ejemplo, que no me queda tan lejos, prefiero ir en bicicleta, porque de alguna manera igual es más barato. Si voy a una junta piola y van a ser las 12 de la noche, me voy a tener que “devolver en Uber para la casa y me van a salir cinco lucas, en vez de que bici me sale gratis. Aparte que caminando no me devolvería, porque igual lo encuentro peligroso, pero en bicicleta de alguna manera sí me siento más segura”.

“Yo creo que en ese sentido, como que de alguna manera igual te da autonomía como medio de transporte. A veces incluso llego más rápido en bicicleta que esperando el Uber, o a veces en Metro, que me da una vuelta innecesaria y en bici llego más rápido”.

El don de la creatividad

Así como pedalear le es algo súper natural, crear historias con humor de situaciones del día a día o subirse al escenario a hacer stand-up son parte de sus dones. 

De todas formas, Vale se considera más creadora de contenido que standapera, “porque creadora de contenido abarca también el contenido que hago para mí, para mis propias redes, pero también igual hago contenido para otras personas, por ejemplo, como del lado de la publicidad. Eso no es tan interesante, pero creador de contenido abarca eso también”.

Y cómo sientes que la gente recibe diferente el humor cuando viene de una mujer versus un hombre?

Yo creo que si lo pensamos a nivel macro, igual en el inconsciente colectivo de Chile, voy a hablar de Chile porque en otros países puede ser distinto, creo que está, como sociedad, la idea de que las mujeres son fomes. Porque efectivamente hay más referentes de humor masculino que femenino digamos.

Un ejemplo de esto, cuenta, es la cantidad de hombres que han ido al Festival de Viña del Mar en comparación con sus pares femeninas. 

“Creo que por una parte, igual también hay una auto presión del mismo género, y también de los demás. Incluso, cuando una colega va a ir al festival, una dice por favor que le vaya bien, porque como que no podemos bancar otra pifia, entonces estamos todos más nerviosos. Por otra parte, ella como intérprete, tiene mucha carga encima. Nosotras como mujeres queremos que le vaya bien, y por otra parte está la mirada del público que es como: ya hazme reír”.

Desde el punto de vista de los tipos de chistes, analiza Vale, aunque hay nichos dentro del humor -como lo que hace ella con Luni- en un contexto más global tampoco se mide exactamente igual. 

Por ejemplo, “un sketch de una mujer que está toda jalada, toda dura y no se puede mover, es muy distinto de ver de un hombre que está todo jalado. Como que ver a un hombre muy muy muy drogado, puede ser muy divertido, pero ver a una mujer muy drogada genera preocupación. Se activan otros receptores, y en ese sentido siento que igual hay una brecha cultural”.

¿Hay alguna comediante o humorista que recomiendes?

Yo soy muy fan de Paloma Salas. Me gusta mucho su humor, creo que abarca muchos tópicos, que por una parte pueden ser femeninos, porque puede hablar desde la menstruación o su hijo, pero también habla del uso del celular, de cosas cotidianas, igual tiene una crítica social súper fuerte, es súper irónica y se ríe de sí misma también. 

Entre sus proyectos, además del show estable que tiene con su amiga Luni (“La Vegana y La Lesbiana”), también están prontas a sacar un podcast.

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