Siempre he querido mostrar a las personas las variadas realidades que existen en el mundo con el fin de generar un poco de conciencia y sensibilizar a los espectadores. La fotografía era algo que no tenía en consideración al momento de expresarme a los demás, yo era un simple estudiante de pedagogía en historia cuando me di cuenta de que la cámara era una herramienta demasiado potente. El tiempo me hizo entender que en realidad no quería ser un historiador o alguien que solamente enseñara hechos pasados, por eso tome la decisión de ser un constructor de la historia, presenciar los acontecimientos en primera persona, el inmortalizar momentos y crear mis propios relatos era lo que en verdad me apasionaba.
La fotografía ha hecho que me acerque más a las personas, la cámara como excusa ha significado que pueda realizar proyectos más íntimos como el presentado aquí, el cual se basa en la vida de mis abuelos, su vejez y su memoria.