La emergencia climática es irreversible en algunos de sus efectos. Así movilizarse en bicicleta es esencial para transformar esta realidad.
Por Eduardo Inostroza Villarroel
A principios de agosto se viralizó por las redes sociales, la noticia de que el cambio climático ha provocado consecuencias irreversibles en el planeta. La BBC resumió un informe publicado por la Organización de las Naciones Unidas (ONU) y que fue realizado por el Panel Intergubernamental de Expertos sobre el Cambio Climático (IPCC, en inglés), quienes estudiaron los resultados de 14.000 artículos científicos, con el objetivo de mostrar cómo el calentamiento global cambiará al mundo durante las siguientes décadas.
Dicho informe señala que la temperatura global alcanzará los 1.5°C en 2040, cualquiera sea el escenario. O sea, si se transforma el modelo de producción actual y las emisiones se reducen considerablemente, llegaremos irreversiblemente a ese punto de calentar el planeta. No obstante las acciones individuales, pueden aportar a las futuras generaciones y transformar la consciencia en torno al consumo excesivo de carne, el uso del plástico y la forma de movilizarse por la ciudad.
La emergencia climática en la ciudad
Valentina Pineda es feminista, geógrafa, urbanista y ciclista, por eso no le fue indiferente tal polémico titular, es que la posible inhabitabilidad impactará con vehemencia a los grupos más discriminados y precarizados socialmente. Más aún cuando “la mayoría de las personas vivimos en ciudades; en el mundo más del 50%, en América Latina cerca del 80% y en Chile es el 90%. Entonces, ¿qué va a pasar con esta gente? Es un desafío tremendo para abordar desde las políticas públicas”, enfatizó Pineda.
La planificación urbana tradicional ha aportado en la crisis climática, ya que las ciudades para funcionar no producen nada, sólo hay demanda. Así para Valentina “es urgente y necesario hacer un cambio en nuestros modos de vida y que sean ecológicamente sostenibles. Hay que dejar de hablar del desarrollo sustentable o el capitalismo verde, que no existen, ya que es un parche absurdo que sigue condenándonos a lo mismo.”
En Santiago uno de los principales emisores de gases contaminantes son los vehículos motorizados particulares, lo que afecta directamente a la calidad de vida de las personas que habitan la ciudad. Por eso, para la geógrafa “probablemente podemos hacer bastante si descongestionamos la ciudad de los automóviles y fomentamos la bicicleta que tiene un rol muy importante en materia de movilidad urbana y urbanismo en general”.
El aporte de la bici
Los principales beneficios de la bicicleta en los radios urbanos es que no genera ningún tipo de contaminación en su uso. No se generan gases contaminantes, no produce ruidos molestos y no se derrochan recursos, como ocurre con los tan odiados “tacos”. Lo último fue confirmado por el Banco Interamericano de Desarrollo, que en un estudio aseguran que en Santiago se pierden 1.046 millones de dólares por la congestión vehicular.
Sobre lo mismo, Marcelo Mena, ex ministro de Medio Ambiente y ahora director del Centro Acción Climática PUCV, dijo “la bicicleta es la medida más costo efectiva para enfrentar el cambio climático. Si hoy dejas el auto en casa, ahorras más de $500 por kilómetro y no emites C02, lamentablemente para los efectos del cambio climático a las autoridades les cuesta ponerla como una medida seria.”
Siendo un transporte sostenible al 100%, la bici es protagonista contra la emergencia climática, aunque “para algunos es más razonable que todos se cambien a autos eléctricos, lo que es mucho más caro, cuando en la práctica la medida más barata es la bicicleta”, asegura Mena.
Como consecuencia de la pandemia, el número de ciclistas aumentó en las principales ciudades de Chile. Para Marcelo Mena “la gente que anda en bici lo hace porque es más rápido, es barato, por cuidar el medio ambiente y para distanciarse del Covid-19. Entonces lo que hay que revisar es cómo hacemos que usar la bicicleta sea más rápido y conveniente, porque las barreras de la mayoría es que les da miedo, por la falta de seguridad vial”.
Activar la movilidad en bicicleta será un claro aporte en la lucha por mejorar las condiciones climáticas del planeta. Así lo han visto diferentes organizaciones, gobiernos y personalidades del mundo que promueven iniciativas para fomentar el uso de la bici.